Se disolvió voluntariamente tras la quiebra del banco. La Sindicatura era el mayor accionista del banco, controlando alrededor del 9,5 % del capital y participando en la gestión del banco al momento de su colapso. Establecida por Félix Millet i Maristany en 1945, Luis Valls consolidó sus acciones dentro del Acuerdo de Administración Fiduciaria de la Sindicatura. Entre los que lideraban la Sindicatura estaba Francisco Aparicio Valls, quien fue secretario de la junta semanas antes del colapso del banco. La Sindicatura estuvo representada en el Consejo de Administración del banco. El último representante de la Sindicatura en el Consejo de Administración del banco fue José Mateu Istúriz, cuyo mandato finalizó en 2017.



